Las luces del auto son uno de los elementos fundamentales para la circulación por dos factores principales: sirven tanto para iluminar el camino cuando tenemos baja visibilidad, como para comunicarse con los demás vehículos sobre qué tipo de acciones podemos llegar a hacer. Por este motivo, resulta fundamental tener en claro cómo y en qué contexto se deben utilizar para evitar accidentes e inconvenientes.
Otro de los factores que se deben tener en cuenta para un manejo responsable es contar con un seguro de auto. Si buscas precio y una póliza con la mejor cobertura y respaldo del mercado, consultá en MAPFRE. Un equipo de profesionales te brindará un plan a tu medida. Si querés saber cómo usar las luces del auto, encuentra la respuesta a continuación.
¿Cómo usar correctamente las luces del auto?
Para saber cómo usar correctamente las luces del auto es necesario saber cuáles son en específico las que intervienen en el proceso de manejo. Si bien cada ciudad o localidad puede tener regulaciones propias específicas, se establece en líneas generales que las luces de posición se deben utilizar en contextos urbanos en todo momento de manejo durante las horas del día y con luz solar.
Cuando el ambiente se oscurece y se vuelve dificultosa la visión, debemos cambiar a las luces bajas. Estas permiten no solo una mejor iluminación del camino sino también el reconocimiento de los demás vehículos hacia el propio. En este sentido, cumple la doble función de iluminación y comunicación.
Cada vez que doblamos en la calle debemos indicarlo con las luces intermitentes, también conocidas como luces de giro o guiñe. La misma se activa hacia abajo para doblar a la izquierda y hacia arriba para la derecha. Se desactivan de forma automática una vez que el auto terminó de doblar.
Cuando cruzamos una esquina de noche y no hay semáforos, podemos indicar nuestra presencia con un segundo de luces de cruce o luces altas, para indicar a los demás conductores de las calles laterales sobre nuestra presencia. En caso de llegar al mismo tiempo, la prioridad (caso indicación expresa contraria), la tiene siempre quien circula por la derecha. En el caso de las rutas es diferente.
La norma general en Argentina establece que las luces bajas se deben utilizar en todo momento de circulación. Esto no importa la hora del día, si hay mucha o poca luz. Si bien a muchos conductores no les parece importante, facilita a los demás el reconocimiento de la dirección del vehículo por la distancia desde la que se aprecian.
Las luces altas preferentemente no deben utilizarse en ruta, ya que por su dirección dificultan la visibilidad de los conductores que se dirigen de frente al punto de encandilarlos. Sin embargo, en ocasiones nocturnas y cuando la ruta presenta movimientos extraños que nos cuesta predecir (o se trata de caminos rurales con poca señalización) se pueden utilizar teniendo en cuenta de desactivarlas cada vez que observamos un auto de frente.
La importancia de la concentración en el uso de las luces
Si bien ya explicamos cómo usar las luces del auto, ahora es importante prestar atención al desempeño. Manejar, en algunos casos, es una actividad que requiere horas de atención. Por este motivo, es importante realizar siempre la actividad a conciencia, colaborando con el organismo para que este pueda tener una máxima concentración y una mejor respuesta ante las eventualidades que surjan. Es crucial tener en cuenta que el manejo es una actividad de riesgo que compromete la vida de una gran cantidad de personas.
La utilización de las luces de forma correcta es una de las maneras que existen de colaborar con la seguridad vial. En este sentido, cabe recordar que siempre observemos luces de emergencia (las que presentan las ambulancias, bomberos o policías), debemos disminuir nuestra velocidad y otorgar paso. Ante cualquier inquietud que surgiera sobre la utilización de las luces o cualquier elemento del vehículo, no dude en consultar la ley de tránsito. La responsabilidad y compromiso individual evitará accidentes.